viernes, 16 de mayo de 2008

MODELOS EDUCATIVOS.

"Chocho, cuando llegue a casa te vas a enterar". Juro por Alaska que eso es lo que ponía, a boli, en el reverso del recibo del banco que nos dejó Luis hace un tiempo (el suficiente para que ni el mismo se acuerde). Teresiña y yo nos miramos. Primero, cierto rubor culpable por entrar en la intimidad de una pareja. Luego risas. Después dudas: ¿cuando llegue a casa te vas a enterar?. Mmmm. Nada, nada. A secas podría parecer hasta una amenaza, pero ese chocho lo convierte en una promesa de amor. Amor líquido.

Asisto a una conferencia de Jacques Lecomte, que sabe un rato de resiliencia y de muchas otras cosas. En nuestro servicio atendemos a muchos padres e hijos afectados por los modelos educativos que él explica.

El modelo de la Permisividad, donde el vínculo afectivo entre padres e hijos es muy alto, pero no existe la menor disciplina, produce Kevin's en cadena. ¿No os he hablado de Kevin? Es un quinceañero que amenaza a sus padres con no volver al instituto si no le compran la moto.

El modelo del Autoritarismo (sólo límites, normas y rigidez, pero nada de afecto) produce, entre otras cosas, jóvenes sumisos y poco autónomos como Carlos, o rebeldes como Miriam, capaz de pegar a su profe si hace falta.
El modelo de la Negligencia (ni vínculo ni límites) suele acabar con los niños en un centro de protección o, como Kris, que busca en la coca el referente adulto que no ha tenido.

En el término medio está la virtud, decía Aristóteles. No sé yo si este principio puede aplicarse a todo, pero funciona bastante en educación. El cuarto modelo, al que J. Lecomte llama, pura y simplemente, Educación , se basaría entonces en un vínculo afectivo fuerte pero sin renunciar a los límites y la disciplina. Algo que vale para padres, pero también para profes o educadores sociales. Al fin y al cabo, como decía Fernando Savater en El Valor de educar, los hijos acaban obedeciendo, si es que por fin lo hacen, por amor.

Gracias Jacques por tus claras exposiciones y tu entusiasmo y gracias Luis por esa lección de vínculo y coraje que nos dejaste sin querer y que sin duda agradeció en su día tu misteriosa y amada "chocho".

Buen fin de semana.
Pd: ¡MÁS MADERA!
La cosa se anima. Los compañeros de EDUCABLOG recogen esta semana sendas reivindicaciones. Una es sobre centros de menores. Podéis consultarla en el blog de Hemen Zergatik Ez y la otra es en el blog de Movimiento anfibio que han impulsado una iniciativa para el reconocimiento de la profesión llamada Salgamos de la sombra. ¡Felicidades!

7 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Buenas y necesarias iniciativas todas ellas. Me ha gustado el resumen que das, pero todavía estoy impactado por lo del boli...

Anónimo dijo...

Como de costumbre, gracias por la difusión, Quique.

Respecto al post, los modelos que expones son clarísimamente identificables cada día, en nuestra labor cotidiana.

Eso sí, el 1º, el premisivo es con el que últimamente más nos encontramos. No sé si responde a que me encuentro trabajando en estos momentos en un pueblo así como muy pijo, de bastante nivelillo socio económico en general y que a los hijos de muchas de nuestras familias se les ha dado siempre todo sin exigir ningún tipo de esfuerzo a cambio.

No sé si será por el momento histórico-sociológico-cultural que nos ha tocado vivir, precisamente después de otro momento en el que le modelo autoritario se extendía por todas las esquinas de nuestra sociedad y, precisamente como reacción a éste, las madres y padres actuales caen fácilmente en el modelo permisivo.

Quizá sea porque nuestros chavales se hallan en la cultura del "lo quiero ahora y lo quiero ya" que también nos rodea en la mayor parte de los contextos que nos rodean...

En fin, no sé si será excesivamente importante conocer de dónde surge.

La conclusión es la aristotélica (o del filósofo que sea - no voy a ir a volver a leer ahora tu entrada, jejeje -) de que mejor en el medio, ¿no?, osea, que fuera extremismos. Una máxima que se puede aplicar a tantos y tantos ámbitos de nuestra vida...

Bueno, perdonad por la txapa... Hoy me he levantado con brío. Buen fin de semana!!

Quique dijo...

Hola Pedro, sí, a mi también me dejó impactado.
Hola Lucce. Son curiosos los movimientos pendulares de la educación. Después de Franco y "la letra con sangre entra", se ha pasado a la permisividad, por compensar. Lacomte explicava que algo parecido ha sucedido en Francia. No tuvieron un Franco, por suerte, pero sí un Mayo del 68 ("prohibido prohibir"). Después del mayo francés viene Sarkozy con el garrote (aunque como dijo en su conferencia Lacomte, la Carla está consiguiendo enternecerlo un poco).

Un saludo

Anónimo dijo...

¿¿¿ Y Berlusconni, no podría hacerse con una Carla de esas ????

PD: Leeremos pronto algo de El Candidato??

Att.

Quique dijo...

Jajaja. Creo que Berlusconi no tiene remedio. Ya lo intentaron las mamachicho, pero ni con esas.

Un saludo, asier.

(estoy con lo de el candidato, a ver si lo acabo)

Ginebra dijo...

Ayer le dije a mi hija mayor que a partir de hoy voy a ser una madre pasota, de ésas que dejan hacer a los adolescentes lo que les salga de la vaina. Que estoy harta de intentar conjugar disciplina y crecimiento. Que yo también estoy en una edad muy mala. Pero mucho, oiga.

Quique dijo...

Jajaja,
Lo bueno de todo es que tú sabes que no va a ser así.