UNA REVISTA DE EDUCACIÓN SOCIAL.

Alaska, 16 de mayo de 2012,

Supongo que he visto muchas pelis. Por eso he fantaseado alguna vez con una redacción llena de humo, periodistas gritando dispuestos a matar por un titular mientras mascullan con un pitillo entre los dientes. Traveling: una mesa polvorienta, llena de papeles, alguna botella de whisky hasta que el prota, un Macmullan, o algo así (Mac, no podía ser de otra manera) , con tirantes,  mira con cara de sabueso las fotos del último asesinato de la  Mafia que irán, fijo, en la portada del día siguiente.

Nuestro Consejo de Redacción de la revista Quaderns d'Educació Social es más prosaico. Cuando nos reunimos los jueves en el CEESC -Jordi, Sara, Charo, Mª Jose, María, Miquel y yo- nos espera una mesa limpia, neutra. Caramelitos envueltos en celofán y una botella de agua.  Hay menos testosterona que en mis fantasias (mmmm...sí) aunque trabajemos un huevo (o varios...¡glups!) con perdón:  somos cuatro mujeres y tres hombres, más venus que marte. Normalmente serios, serias, pero con apuntes cachondos, cachondas. Un  humor irónico, fino, de consejo de redacción, un síntoma de que se trabaja mucho. Es una de las cosas que me gustan de venir a aquí: se trabaja duro y tenemos un objetivo. Me perdonarán pero tengo ya una edad en la que sé diferenciar las reuniones en las que se construye algo de las reuniones.   

Tenemos una misión, como Tom Cruise, que es sacar para octubre o noviembre de este año un nuevo número de la revista. Cuando digo nuevo, digo nuevo. Un número remodelado de arriba a abajo: desde el diseño de la portada al contenido. Nos lo han pedido los colegiados y nos lo pide el cuerpo. Queremos que siga siendo una revista científica, que mantenga la calidad, pero abierta a otros formatos (entrevista, reportajes) y con una perspectiva de la educación social que abarque diferentes ámbitos, como la cultura o la tecnología. Queremos cuidar mucho el lenguaje. Que entre por los ojos y por la boca, que huela a libro, que se lea a gusto, es decir, que de gusto leerla. Que la pueda leer mi madre, vaya (mi madre lee a Kundera, cuidadito). 

Es una gozada reunirse los jueves con este excelente equipo y hablar de portadas, de dos tintas, de posibles autores y temas. 
En tiempos de crisis, de primas de riesgo , de ajustes y políticos corruptos, hacer un libro es un buen motivo para seguir viviendo. 
Un orgasmo. 


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Alaska 2099 vuelve el 1 de junio, a las 21h, a la sala Almazen, en el Raval (Barcelona).